El museo de Aveiro está situado en el Antiguo convento de Jesús. La princesa Juana, hija del rey Afonso V de Portugal y futura santa, se retiró a este convento en 1472, donde vivió sus últimos 18 años.Es un interesante lugar para visitar, sobre todo por su iglesia barroca.
En el coro bajo se encuentra la tumba de la santa, una obra de principios del siglo XVIII del arquitecto João Antunes, realizada en marquetería de mármol policromado y soportada por ángeles sentados, también de mármol.
Retrato da princesa santa Joana es la pintura es la más emblemática del museo. Está atribuida a Nuno Gonçalves (o a su entorno), y sorprende por la falta de expresividad de los rasgos de la joven, que está representada con el traje de la corte, en un retrato realizado con el fin de encontrarla un pretendiente que ella no deseaba.