El puente de Isabel II se había inaugurado diez años antes, con un gran desfile militar. Hasta entonces se cruzaba por el puente de barcas que ya hemos visto en anteriores entregas, que claro está, quedaba inutilizado de manera regular por las crecidas del Guadalquivir. El nuevo puente se construyó tomando como modelo el Pont du Carrousel de París, utilizando piedra para los pilares y hierro fundido para los arcos. Las piezas de hierro se realizaron en la propia Sevilla, en la fundición que Narciso Bonaplata había montado en el desamortizado convento de San Antonio.
Un puente que despertó el interés, y que llegó a ser el emblema de la primera revolución industrial de la ciudad. Volvamos a observarlo en Sevilla. Vista tomada desde Triana.
El edificio que se puede ver sobre la margen izquierda es el antiguo convento de los Remedios, hoy sede del Museo de Carruajes. La imagen está tomada desde el paseo de las Delicias, lugar de recreo en la época. La imagen debió hacerse muy popular, pues Manuel Barrón y su taller crearon una gran cantidad de pinturas muy similares, de diferente calidad y distinto grado de detalle. De hecho, ésta no es la mejor según los expertos: ese honor lo detenta el lienzo titulado Vista de Sevilla desde la Punta del Verde (1856), que pertenece a la colección del conde de Ybarra.
La otra imagen típica que realizó Manuel Barrón es la de las inmediaciones de Sevilla. También tiene muchas variantes, como en el caso anterior, de diferente calidad y nivel de detalle. Una de ellas es Vista de Sevilla desde San Juan de Aznalfarache. San Juan de Aznalfarache es una pequeña población al este de Sevilla, muy cercana, que desde siempre fue un sitio de recreo para los habitantes de la ciudad, como recuerda Mateo Alemán en el segundo capítulo de su Guzmán de Alfarache.
De su contenido sólo quiero dar algunos apuntes. En el cuadro se puede apreciar el verdadero curso natural del Guadalquivir: actualmente se utilizan cauces artificiales que haría que viésemos la isla de la Cartuja. Puede verse en la pintura el vapor que viene de Sanlúcar de Barrameda. En primer plano, un grupo de personas danzan flamenco. En la colección Masaveu hay otra versión de esta pintura. Habrá que ver si puede contemplarse con la reciente ampliación del Museo de Bellas Artes de Oviedo. Armando Palacio Valdés dijo que desde el cerro de San Juan se contempla la vista más bonita del mundo
Los Reales Alcázares de Sevilla son la última de Manuel Barrón que veremos hoy. El Salón del techo de Felipe II, con el Arco de los Pavones, deja ver al fondo el Patio de las Doncellas. Con tanta Sevilla en Arte a las ocho, había que tener un pequeño detalle con los seguidores de Juego de Tronos y sus Jardines del Agua del reino de Dorne.